Nos unimos a IX Festival Palabra en el Mundo
Del 11 al 24 de mayo de 2015 se llevará a cabo el IX Festival Palabra en el Mundo. Nos unimos a él, por medio del Colectivo Cultural Pie de Lana en Guatemala, Centroamérica. A continuación, presentamos la Declaración de Proyecto Cultural Sur sobre la violencia.
Declaración de Proyecto Cultural SUR sobre la violencia
Introducción:
La cuestión de la violencia es un tema que suscita preocupación tanto
por su carácter dramático como por sus consecuencias, no solo a nivel de la
sociedad toda, sino también en la vida cotidiana.
La violencia se ha convertido en un problema estructural en todas las
sociedades del planeta, abarca un amplio espectro de campos pero es innegable
que en dos de ellos es donde se manifiesta con mayor contundencia: la violencia
intra-familiar y la violencia social.
Mientras la violencia social es abordada por algunos gobiernos y ciertos
sectores de la sociedad como un “problema de seguridad” o como una mera
cuestión de “salud pública” y entonces sólo aparece como relevante el dato
estadístico de mortalidad, podemos observar, en lo sucedido en Argentina con
Luciano Arruga, una política de Estado que con distintas modalidades se replica
en toda América Latina. Una política que da cuenta de cómo se constituye la
estructura de una sociedad determinada, a Luciano lo mató la policía y lo
desapareció el Estado… no es un caso aislado, sino que es una más de las
variadas metodologías que usa el Estado para disciplinar en los barrios pobres,
para imponer el control social al pueblo, junto con las detenciones
arbitrarias, el gatillo fácil, las torturas, el hostigamiento permanente a
los/las jóvenes humildes.
En este sentido pensamos que la agudización del problema de la violencia
social se entiende:
Violencia social:
1- dentro del estilo de vida que genera el modelo de una sociedad de
mercado, capitalista. Violencia social como producto de un
estilo de vida basado en el mercado neoliberal, que se fundamenta en la
ideología de la supervivencia del más apto en la lucha encarnizada por la
obtención de los bienes materiales, sociales y culturales que la sociedad
ofrece en el mercado, vale decir, la lucha por la supervivencia material y
social. Esto constituye una situación de violencia estructural, genera
situaciones de desigualdad social y de comportamientos que se traducen en
indicadores de violencia social;
2- como estrategias de sobrevivencia del yo tanto individual como
colectivo ante una sociedad de tipo caníbal. En este sentido se produce entonces un fenómeno de alienación que
implica definir la violencia como el único medio válido para la obtención de
los objetivos propuestos. Y en un contexto en el cual el modelo de realización
social se define por valores de éxito material, status socioeconómico y logro
individual, el mecanismo de la violencia para la obtención de este ideal
aparece como el camino a seguir en la subjetividad de una sociedad;
3- dentro del contexto de situaciones
hiper-desiguales de las sociedades globalmente consideradas. Por todos los elementos analizados, las sociedades han producido
situaciones de desigualdad sociocultural de manera crónica. Estamos hablando de
una multiplicidad de factores, procesos y situaciones que intervienen en este
sentido valores que tenderían a la integración se sustituyen por valores que
promueven el individualismo, el pragmatismo materialista. En su defecto lo que
se producen son amplios procesos de desocialización y deculturización que
promueven la incomunicación, el individualismo y por lo tanto la violencia
social.
El problema de la violencia social no debe ser visto aislado de otros
temas como la pobreza, la política, la justicia social, la falta de
oportunidades, la salud, la educación, las instituciones, el Estado etc.
Violencia intra-familiar
La forma más común de violencia contra la mujer es la violencia en el
hogar o en la familia, las investigaciones demuestran que una mujer tiene mayor
probabilidad de ser lastimada, violada o asesinada por su compañero actual o
anterior que por otra persona. Los hombres pueden patear, morder, abofetear,
dar un puñetazo, tratar de estrangular, quemar o tirar ácido en la cara, usar
armas letales, atropellar con un auto a sus esposas o compañeras. La naturaleza
de la violencia contra la mujer en el ámbito familiar ha sido comparada con la
tortura, las agresiones están destinadas a lesionar la salud psicológica al
igual que su cuerpo y suelen ir acompañadas de humillación y violencia física.
Violación y abuso sexual puede ser realizado por extraños y conocidos,
pero nunca con culpa de la víctima. Sin embargo existe la creencia que es la
víctima quien la provoca, esto se ve con expresiones dichas tanto por hombres
como por mujeres tales como: “mirá como está vestida” refiriéndose a una
mujer.
En Argentina, solo por señalar un país, muere una mujer cada 30 horas,
muchas son muy jóvenes, tales asesinatos los definimos como femicidios. Son
asesinadas por el sólo hecho de ser mujeres. La mirada que pretendió instalar
la prensa hegemónica Argentina sobre una joven de un barrio de trabajadores/as
del norte del conurbano bonaerense, Melina Romero, fue el de la pibita
rápida, fácil, sin rumbo, de padres separados, una fanática de boliches que
abandonó la secundaria. Instalando la idea de que ella se lo había buscado.
Sobre la víctima, vuelven a recaer, entonces, por su pertenencia de clase,
violencias que la culpabilizan y la hacen responsable de su propia muerte.
Lesiones en los niños:
Los niños en las sociedades violentas pueden también ser víctimas de
maltrato. Con frecuencia, los niños también se lastiman mientras tratan de defender
a sus madres. Las niñas que presencian a su padre o padrastro tratando
violentamente a su madre tienen además más probabilidad de aceptar la violencia
como parte normal del matrimonio que las niñas de hogares no violentos. Los
varones que han presenciado la misma violencia, por otro lado, tienen mayor
probabilidad de ser violentos con sus compañeras como adultos.
Embarazo no deseado a temprana edad:
La violencia contra la mujer puede producir un embarazo no deseado, por
violación o al afectar la capacidad de decisión de la mujer a usar
anticonceptivos, muchas mujeres son agredidas cuando plantean esta elección a
sus compañeros.
Las adolescentes:
Investigaciones dan cuenta que las niñas que son maltratadas sexualmente
durante la niñez tienen mayor riesgo de embarazo no deseado durante la
adolescencia con consecuencias como resolver su dilema por medio de abortos
ilegales con desenlace mortal.
Estas violencias no pueden observarse ni tratarse por separado de otro
aspecto más amplio como es la violencia que genera una sociedad. En este
sentido es un ejemplo de injusticia cuando sale en libertad el agresor de una
mujer o cuando después de varias denuncias una mujer muere como producto de la
agresión de su compañero o cuando las facciones políticas no se ponen de
acuerdo al legislar el aborto en una situación de violación sexual a una mujer,
etc.
No podemos hablar de una sociedad en donde la violencia social es un
fenómeno extraño sobre todo en América latina, nos hemos constituido como
pueblos sometidos por centros de poder que han fundamentado las relaciones
sociales con proyectos de dominación socioeconómicos apoyados por gobiernos
locales, al mismo tiempo que al interior de la sociedad misma, se fue
constituyendo un modelo que supone relaciones de explotación, opresión y
dominación entre los grupos de poder y los grupos subordinados que se
fundamentan no solo en la fuerza sino también en una ideología de la
desvalorización y la autodesvalorización como pueblo y como individuo.
Nosotros como Proyecto Cultural SUR que tiene como consigna: “Unidos en
la diversidad” y siendo SUR no como punto cardinal ni geográfico: Somos SUR en contraposición a estos poderes que están en el norte.
SUR no es un punto cardinal es un punto de esperanza, es un punto de falencia y
un punto de necesidad. Todos los que no están en las decisiones del poder
mundial, estén donde estén, estarán en el SUR. A los nefastos poderes del
norte, oponemos la gloria de nuestros talentos, unidos en el respeto y la
defensa a las diferencias. Somos SUR como un acto de humanización de la
naturaleza, como una acto de naturalización del ser humano, en definitiva somos
SUR como un acto de amor.
Declaramos:
1- Estar en contra de
todo acto de violencia ejercida por una o varias personas donde se somete de
manera intencional al maltrato, sufrimiento u acción que atente contra la
integridad tanto física como psicológica y moral de cualquier persona o grupo
de personas.
2- Entendiendo que
muchas veces el estilo tradicional del ejercicio político, la indiferencia del
ciudadano común ante los acontecimientos del país, la no participación en las
decisiones, así como la existencia de tantas formas de evasión a los problemas
de la realidad que se producen a diario como sociedad, el manejo de algunas
instituciones, etc., genera inacción y apatismo, nosotros como SUR proponemos
lo contrario: un trabajo cultural permanente donde se supere la indiferencia y
se acentúe el compromiso para la acción a través de un trabajo de gestión
cultural internacional, que proviene del trabajo que cada Núcleo cultural SUR
de cada ciudad, comunidad, país, etc, realice.
3- Empatía y
compromiso: como SUR proponemos estar al tanto de las necesidades, situaciones
de injusticia, de paz social, violencia etc. que se producen en todos los
países del mundo expresando y dando a conocer nuestro sentimiento de
solidaridad para con todos.
4- Nos oponemos a todo
acto de discriminación en todas sus formas y manifestaciones, que son factores
de odio y división entre los seres humanos, afirmando nuestra comprensión y
respeto de la dignidad de las personas de todo el mundo. Rechazamos toda idea o
acción de superioridad y prejuicios sociales de uno sobre otro.
5- Nos declaramos a
favor de todas las expresiones efectivas para fomentar la comprensión, la
tolerancia y la amistad entre los hombres y los países de todo el planeta, a
favor del cuidado de la naturaleza, la ecología y la paz mundial.
En todo lugar de la tierra, un 26 de abril del 2015
Comentarios
Publicar un comentario